Con una altura de tres hombres, los Dreadnoughts de los Marines Espaciales son de las máquinas de guerra más antiguas sobre los campos de batalla del 41º Milenio. Se dice que algunos Dreadnoughts tienen incluso decenas de miles de años y datan de la Gran Cruzada, cuando el Emperador todavía caminaba entre los suyos. El arte de la construcción de los Dreadnoughts se perdió hace mucho tiempo debido a que los conocimientos arcanos necesarios para ello se fueron convirtiendo en mitología ritualizada, así que cada Dreadnought de un Capítulo es una reliquia valiosísima. Son una encarnación viviente del Dios-Máquina y representan la unión definitiva entre lo biológico y lo mecánico, ya que cada Dreadnought contiene una entidad consciente en su interior. Los pilotos encerrados en el sarcófago de un Dreadnought a menudo tienen recuerdos que se remontan a varios miles de años atrás. Estos antiguos guerreros representan un lazo tangible con el pasado de un Capítulo y su herencia.

Siglos de Guerra

La parte biológica de un Dreadnought no es un hombre ordinario, sino uno de los Antiguos: un poderoso héroe de los Marines Espaciales que sufrió heridas mortales en combate y al que se consideró merecedor de ser colocado en el interior del sarcófago blindado de un Dreadnought. El entierro de los maltrechos restos del Antiguo sigue siendo un ritual de gran importancia en el que se ven implicados sus hermanos de batalla, los Tecnomarines del Capítulo y los Apotecarios. Se considera un gran honor para un Marine Espacial ser enterrado en un Dreadnought, pues estos antiguos guerreros son muy respetados por sus hermanos de batalla. El Antiguo permanece suspendido en una solución de fluidos amnióticos y es quirúrgicamente implantado en el interior del sarcófago blindado, donde sus sentidos mecánicos le permiten percibir el mundo que le rodea. De este modo, puede seguir luchando por el Emperador durante los siglos venideros sin que pueda abandonar jamás su cuerpo de metal hasta que sea destruido.

En batalla, los Dreadnoughts son adversarios terribles, pues avanzan sin vacilar con estruendosas zancadas mientras las balas del enemigo rebotan en su gruesa armadura de adamantium. Fibrosos haces de músculos estimulados eléctricamente mueven sus pesados miembros y les permiten disparar en movimiento sus devastadoras armas, así como luchar con toda la ferocidad y destreza que poseían cuando eran Marines Espaciales. Además de ser unos guerreros temibles, la sabiduría acumulada durante siglos de batallas los convierte en un recurso inestimable, ya que su vasta experiencia implica que, seguramente, han combatido en todo tipo de enfrentamientos imaginables. Casi nada puede derrotar a un Dreadnought al asalto y sus armas de combate cuerpo a cuerpo pueden partir en dos incluso los vehículos con el blindaje más pesado. Los Dreadnoughts son excepcionalmente difíciles de abatir en batalla y, en la mayoría de casos, solo la completa destrucción del sarcófago acabará con su piloto. Los Dreadnoughts destruidos, además, únicamente son abandonados en las circunstancias más adversas y cualquier Marine Espacial luchará con una furia imparable para recuperar un Dreadnought caído con tal de que su ocupante pueda descansar en paz en los sepulcros del Capítulo. Entonces, el armazón recuperado podrá ser amorosamente restaurado hasta que esté plenamente operativo y pueda esperar a su próximo ocupante.

Los Antiguos

Cuando no se encuentran en acción, los Dreadnoughts descansan en cámaras selladas de estasis en las profundidades de la fortaleza-monasterio de su Capítulo para prolongar su vida al máximo. El lugar de descanso de los Dreadnoughts del Capítulo es una capilla sagrada en la que los Tecnomarines atienden a los Antiguos a su cargo con gran esmero y les aplican cuidadosamente aceites y ungüentos sagrados mientras cantan las Letanías de Conservación. Para honrar a estos valientes guerreros, los Tecnomarines les permiten dormir y solo los despiertan en caso de necesidad extrema. Cuando son llamados al combate, los Dreadnoughts son sacados de sus cámaras y se les engancha en la piel la Runa del Despertar.

A medida que un Dreadnought combate siglo tras siglo, inevitablemente, los lazos del Antiguo con el mundo material se debilitan. Por este motivo, tiene que pasar cada vez más tiempo descansando y su mente se vuelve cada vez más distante. Uno de los Dreadnoughts más antiguos de los que hay constancia es Bjorn Garra Implacable, de los Lobos Espaciales. Bjorn fue un joven guerrero en los días de los Primarcas y se dice que luchó junto al mismísimo Primarca Leman Russ. Desde que fue encerrado en el armazón acorazado de un Dreadnought, ha luchado en algunas de las batallas más famosas de la historia bañada en sangre del Imperio; e incluso ha dirigido personalmente la defensa de su planeta natal, Fenris.

El Arte de la Muerte

Los Dreadnoughts son despertados cuando se sabe que la lucha va a ser encarnizada y campal. Son mucho más eficaces si se los emplea en situaciones en las que cuenten con una considerable cobertura, ya que así el enemigo no puede trazar una línea de fuego hacia ellos. Destacan en los combates en zonas urbanas y en túneles subterráneos, así como en acciones de abordaje, en las que pueden acercarse rápidamente al enemigo y emplear sus devastadoras armas de asalto. Los anclajes para armas de un Dreadnought permiten equiparlo con diversas configuraciones de armamento según convenga a la situación táctica. Estas armas son bastante similares a las de los Exterminadores de los Marines Espaciales. En el pasado, los Dreadnoughts se utilizaban para probar prototipos de armas diseñadas para armaduras de exterminador, especialmente los primeros modelos de cañón de plasma. No obstante, las armas de un Dreadnought gozan de una mayor estabilidad, mejores sistemas de puntería y una mayor cantidad de munición que sus variantes para Exterminador. El tamaño sobrecogedor de un Dreadnought permite, además, incorporar sistemas de refrigeración por inyección de nitrógeno líquido en torno a sus armas de disparo rápido, lo que resulta en un sobrecalentamiento menor y en menos encasquillamientos.

Además de poderosas armas pesadas, los Dreadnoughts pueden incorporar letales armas de combate cuerpo a cuerpo que cuentan con grandes pistones servomotrices para incrementar la fuerza de sus brazos. Esto les permite agarrar, rotar, abrir grandes agujeros en los materiales más duros o atravesar los blindajes más gruesos. El Dreadnought Furioso de los Ángeles Sangrientos es un ejemplo muy claro: su fuerza es tal, que puede despedazar con facilidad incluso un Land Raider.

Muerte Desatada

A través de la historia, los Dreadnoughts se han visto implicados en las más sangrientas batallas inscritas en los anales del Imperio. Sus actos de heroísmo forman parte de las leyendas de todos los reinos de los hombres y pocas visiones son más inspiradoras o terroríficas que una de estas grandes bestias mecánicas de destrucción avanzando a toda velocidad por el campo de batalla. Muchos Dreadnoughts han logrado la fama por derecho propio y las narraciones de sus actos de coraje y sacrificio en nombre del Emperador se cuentan por todo el Imperio.

 

Sacado de la Pagina de la GW