La escasa información sobre la Batalla por Polía, que tuvo lugar en el planeta Nimbosa, no se había recogido en los archivos imperiales hasta hace poco. No obstante, esta información arroja mucha luz sobre la desesperada naturaleza de los combates que tienen lugar en un entorno urbano. En Polía, la Guardia Imperial del regimiento los Primeros Nacidos Vostroyanos se enfrentó en un conflicto de proporciones épicas a los cuerpos de cazadores tau liderados por el Comandante Vral’ant’pad. 

LA EXPANSIÓN DE LA SEGUNDA ESFERA 

Cuando la Flota Enjambre Kraken invadió el Segmentum Ultima, las fuerzas imperiales acuarteladas a lo largo de la Franja Este fueron enviadas a plantar cara a esta nueva amenaza. Los Tau vieron en este movimiento la oportunidad de expandir su imperio y no tardaron en anexionar a sus tierras una serie de planetas limítrofes del Imperio de la Humanidad, aprovechando que en estos momentos estaba distraído. Nimbosa era el más importantede todos estos planetas. 


Ahora que la mayor parte de la Guardia y la Armada Imperiales estaban combatiendo contra la amenaza tiránida, los Tau invadieron Nimbosa con gran cantidad de fuerzas. El Comandante Vral’ant’pad, el líder de los Tau, pretendía llevar a cabo una táctica de exterminio total. Los únicos efectivos de la Guardia Imperial que había en el planeta eran los del IX de los Primeros Nacidos Vostroyanos, que decidieron hacerse fuertes en la ciudad fábrica de Polía. Los Primeros Nacidos, que servían bajo el mando de Graf Toschenko, sabían que no tenían nada que hacer contra un enemigo tan numeroso y que su única oportunidad era resistir hasta que llegasen refuerzos: algo que tardaría semanas o incluso meses. 

El complejo manufactorial era una vasta zona industrial con edificios que llegaban hasta el cielo. Consistía en docenas y docenas de talleres, un laberinto de grises edificios del archivo del Administratum con una extensión de seis bloques, una catedral de la Ecclesiarquía y el manufactorum en sí mismo. 

Los vostroyanos no perdieron ni un minuto y empezaron a establecer una serie de puntos estratégicos desde los que resistir los ataques de los Tau. Las paredes internas de los edificios fueron derribadas para facilitar el paso y se utilizó la maquinaria industrial para levantar barricadas con las que bloquear las calles. En multitud de edificios se ocultaron trampas explosivas, mientras que los más difíciles de defender se saquearon para que no tuvieran ningún valor y se prepararon para poder demolerlos en el momento Adecuado. La munición se distribuyó en tres puntos estratégicos y el enorme complejo manufactorial se reforzó con paneles antiaéreos y estructuras de soporte, además de instalarse una vocorred en toda la zona. Toschenko y sus oficiales usaban el manufactorum como centro de operaciones, así que los vostroyanos no tardaron en llamar a aquel lugar “la Fortaleza de Toschenko”. 


VRAL’ANT’PAD ATACA 
Cuando la fuerza de Vral’ant’pad llegó al planeta, se encontró con que las tropas imperiales le estaban esperando bien preparadas. Otros comandantes tau habrían ofrecido a su enemigo la oportunidad de rendirse, pero Vral’ant’pad había sido discípulo del impulsivo O’Shovah y pertenecía al agresivo clan de los Vior’la, por lo que lanzó su ofensiva sin demora. Nutridos bancos de Mantarrayas abrían el avance mientras los Cabezamartillos bombardeaban las posiciones imperiales. Cientos de equipos de exploradores descendían por cables de acero sobre los edificios desde los vehículos gravitatorios y respondían al fuego enemigo para arrebatar el control de los tejados a los vostroyanos. Una vez puestos los pies en el planeta, Vral’ant’pad decidió bombardear a la Guardia Imperial hasta que se sometiera, pero los muros de la catedral y de “la Fortaleza de Toschenko” eran demasiado robustos para las armas que tenía a su disposición en tierra. Tras varios días de bombardeos, no parecía que las fuerzas imperiales tuvieran intención alguna de rendirse, por lo que Vral’ant’pad decidió utilizar la cobertura que le proporcionaban los bombardeos para utilizar una variante mejorada de la filosofía kauyon (el cazador paciente) y envió al ataque unidades de Kroot con la intención de arrasar a los Guardias Imperiales. Pero los Kroot se encontraron con una barrera de disparos láser que fue diezmando sus filas mientras avanzaban. Sin embargo, poco a poco, los certeros disparos que los exploradores llevaban a cabo con sus rifles aceleradores fueron acallando las armas imperiales y los Kroot consiguieron llegar hasta la catedral. Una vez dentro, los salvajes y carnívoros Kroot abrieron una gran brecha entre los defensores vostroyanos, a quienes devoraban a su paso. 


CONTRAATAQUE 
Toschenko se dio cuenta de que el enemigo estaba desbaratando sus defensas una tras otra, sistemáticamente. No había posibilidad de victoria a menos que lanzase un contraataque. Entre las filas vostroyanas se extendió la orden de alzarse y asaltar a los Tau. Más de dos mil vostroyanos abandonaron su refugio en la fábrica y corrieron por las calles sembradas de cráteres hacia la catedral, donde sus camaradas estaban siendo aniquilados. Sedientos de venganza, cargaron al interior del edificio, pero los Kroot se retiraban a toda velocidad para no enfrentarse a ellos. Animados por este éxito aparente, Toschenko y sus hombres, apoyados por los pocos tanques operativos que quedaban, avanzaron para trabarse con varias unidades tau que se habían hecho fuertes en los talleres. Los guardias imperiales apenas encontraban resistencia mientras avanzaban por las calles vacías y la vanguardia del ejército a punto estaba de llegar a su destino cuando Vral’ant’pad cerró la trampa. Unidades de armaduras Crisis empezaron a disparar desde los tejados a los soldados que avanzaban por las amplias calles; los tanques salían volando por los aires cuando los misiles buscadores guiados por los rastreadores impactaban en su blindaje posterior y las armaduras miméticas acababan con compañías enteras. 


LA RESISTENCIA DE TOSCHENKO 
La escuadra de mando de Toschenko, al frente del avance vostroyano, se vio sorprendida al descubierto por los disparos cruzados. Herido y ensangrentado, Graf Toschenko se puso en pie, arrebató la bandera del regimiento al abanderado muerto y la levantó para exhortar a sus hombres a luchar hasta el final. Con los supervivientes reuniéndose a su alrededor, comenzó la verdadera batalla. Los guerreros del fuego tau, que sabían que su enemigo estaba herido de muerte, avanzaron disparando sus rifles de inducción y, en cuanto llegaron hasta donde se encontraba atrincherado su enemigo, se produjo un cruento combate. 
Cientos de guerreros del fuego murieron víctimas de las bayonetas y las espadas sierra de la Guardia Imperial, pero los vostroyanos eran muy pocos y no tenían ninguna oportunidad. El Comandante Vral’ant’pad ordenó a su escolta que sobrevolara su ejército y que lanzará una devastadora carga que acabó matando a Toschenko y eliminó toda esperanza imperial de obtener la victoria. Cuando el Imperio por fin pudo destacar soldados en Nimbosa, el Castellano Folker de los Templarios Negros envió una fuerza de reconocimiento al lugar en el que habían muerto Toschenko y los Primeros Nacidos Vostroyanos. El Hermano Lodhuvico informó de que las ruinas de Polía estaban sembradas de cadáveres de Guardias Imperiales y equipo sin tocar. No había señales de los Tau entre los edificos en ruinas de Polía.

sacado del suplemento muerte en las calles.Por sagakanon de la Colmena