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Articulo original posteado en el foro viejo por Asgaard 

En este juego que nos toca vivir sabemos muchas cosas de armas, tacticas, batallas, razas alienigenas, pero quizas nos hemos dejado un poco de lado lo más importante, como vive, siente y respira el ciudadano imperial de a píe.

Esto es un ensayo sobre lo que he ido recopilando en juegos, trasfondo, relatos y novelas sobre un aspecto clave en el mantenimiento de todo Imperio, el Comercio.


COMERCIO IMPERIALIS
by Asgaard (basado en relatos y trasfondo de Games Workshop)


En el Imperio es muy importante el comercio y el traslado de materiales entre los distintos mundos, sin este comercio los mundos imperiales sucumbirian. Sin alimentos un mundo colmena moriría, y sin materias primas, un Mundo Forja se apagaría. La ingente cantidad de movimientos son llevados a cabo por la gran flota civil existente en el Imperio. Aunque en principio pueda parecer que el comercio es libre dentro del Imperio, la necesidad del uso de Navegantes, y el hecho de que las naves viajan realmente por el Reino del Caos, ocasionan que el comercio esté bastante vigilado dentro del Imperio.

En general existen dos tipos de comercios dentro del Imperio, el comercio interior, y el exterior. El comercio interior se realiza entre los mundos de un mismo sistema solar. En este caso no es necesario realizar ningún salto a la Disfromidad, ni mantener un Navegante, ni tener protecciones especiales contra el Caos en las naves. Es por ello que el Imperio no vigila apenas este flujo de carga, delegando en la labor del Gobernador Imperial para la adjudicacion de licencias. La vigilancia del transporte de mercancias se lleva a cabo por agentes del Arbites.

Por otro lado, el comercio exterior requiere algunos puntos adicionales a la hora de llevarse a cabo, un capitán de navio debe contar con una astronave algo más grande, capaz de albergar un Motor de Disformidad. Este motor y el casco de la nave deben ser revisados continuamente para evitar que algún ente de la Disformidad pueda atravesar las defensas en medio del viaje. Es preciso contar además con al menos un Navegante para realizar el viaje, es frecuente que viaje con ellos un Astrópata para poder comunicarse con el destino. Las licencias para este tipo de comercio son otorgadas directamente por el Administratum (el departamento correspondiente que no se como se llama), y posteriormente gestionadas por los diferentes Gobernadores Planetarios. Cada licencia otorga una hoja de ruta preestablecida y un tipo de carga a transportar. Estos cargueros son vigilados por agentes del Arbites, y ocasionalmente por miembros de la Inquisición.

Un tipo especial de licencia comercial es la de Comerciante Libre (Rogue Trader). El Comerciante Libre es tanto una herramienta como una forma muy lucrativa de ganarse la vida. En su forma básica la licencia del Comerciante Libre indica un planeta base del comerciante en cuestion, pero no le indica ni hoja de ruta ni carga predefinida. Esto permite a los Comerciantes el actuar libremente entre los mundos y sistemas que ellos prefieran, incluso con planetas externos al Imperio, o planetas Xenos. Son también una herramienta muy válida del Administratum, ya que en su continua búsqueda de ingresos, suelen investigar, explorar y descubrir nuevos planetas para el Imperio. Cuando un Comerciante Libre descubre un nuevo planeta puede solicitar para él derechos de comercio con ese planeta, obteniendo la exclusividad. En ocasiones también puede solicitar ayuda militar al Imperio (que se la otorgará o no dependiendo de lo que gane), aunque por lo general eso supondría hacer público el descubrimiento de este nuevo mercado, atrayendo competidores y perdiendo beneficios. No es extraño que estos comerciantes sean vigilados estrechamente por la Inquisición, especialmente la Ordo Xenos. En ocasiones algunos Comerciantes Libres aprovechan estas licencias para traficar con mercancias entre los propios mundos imperiales. (Es sin duda uno de los personajes más versátiles de todo el universo de wh40k, y no me extraña nada que la primera edición tratase casi en exclusividad de este personaje).


Dependiendo del planeta en el que se concedan las licencias de comercio, se pueden establecer o no Gremios, Cooperativas, o Casas Nobles de Comerciantes. En general se trata siempre de lo mismo (aunque llamado de diferentes modos), un grupo de personas, clan o familia que llega a un acuerdo especial con alguna casa de navegantes de forma que ellos, y nada más que ellos, puedan hacer uso de sus servicios. De esta forma consiguen rápidamente eliminar a la competencia y hacerse fácilemente con el monopolio en el Comercio en algún mundo concreto.

Una vez conseguido esto, y dependiendo de la cultura planetaria que se tenga, estos grupos actuarán para enriquecerse ellos mismos, o para abaratar los costes de mercancias. Un ejemplo pueden ser las Casas Nobles del sector Helicano, casas hereditarias las cuales luchan constantemente entre sí por un poder aun mayor, enriqueciendose a costa del resto de la gente... o bien los Gremios Comerciantes del Reino de Ultramar, que no son más que una agrupación de comerciantes, unidos por un interes común y no la misma sangre, que se unen para solicitar precios comunes a las casas de navegantes, y así conseguir presionar en bloque abaratando costes, pero obteniendo menor margen de beneficio.